Los tipos de conversiones en los que centrarse varían en función de sus objetivos empresariales. Pueden ir desde macroconversiones, como compras de productos, suscripciones y generación de clientes potenciales, hasta microconversiones, como suscripciones a boletines, comparticiones en redes sociales o descargas de recursos gratuitos.
Es esencial identificar las conversiones más relevantes para sus objetivos empresariales y el recorrido del cliente.
Aunque tanto el CRO como el SEO pretenden mejorar el rendimiento de su sitio web, estos se centran en aspectos diferentes. El SEO tiene como objetivo aumentar la visibilidad y el flujo de clientes desde los motores de búsqueda. Por otro lado, el CRO, se centra en optimizar la experiencia del usuario una vez que los visitantes llegan a su sitio web para aumentar la probabilidad de que completen una acción deseada.
Ambas son partes integrantes de una estrategia de marketing digital eficaz.
La tasa de conversión se calcula dividiendo el número de conversiones por el número total de visitantes de su sitio web y multiplicando el resultado por 100%.
Por ejemplo, si su sitio web tuvo 20.000 visitantes y 1.000 de ellos realizaron una compra, su tasa de conversión sería (1.000 / 20.000) * 100% = 5%.
Identificar las barreras de conversión es una parte fundamental del CRO e implica un análisis exhaustivo de los datos. Las tasas de rebote elevadas, los abandonos repentinos en páginas específicas y el bajo rendimiento en dispositivos móviles pueden indicar posibles deficiencias. Además, los tiempos de carga lentos y la navegación confusa podrían disuadir a los usuarios.
Los comentarios de los clientes y las pruebas de usabilidad también son recursos valiosos para descubrir barreras. En definitiva, comprender y atender a los usuarios, así como su recorrido por el sitio web es clave para identificar y abordar los posibles obstáculos a la conversión.
Las pruebas A/B son un método crucial en el CRO. Consiste en crear dos versiones de una página web, cada una con un elemento diferente, como puede ser una call-to-action o una imagen. Al dirigir la misma cantidad de flujo a cada versión, podemos evaluar qué variante fomenta más conversiones.
Este enfoque permite tomar decisiones basadas en datos sobre cómo optimizar las páginas web, eliminando las conjeturas y promoviendo los elementos de contenido y diseño más eficaces para mejorar las tasas de conversión.
El plazo para ver resultados del CRO varía mucho y depende en gran medida del tamaño de su sitio web y del volumen de flujo de información que reciba. Por lo general, puede llevar desde unas pocas semanas hasta varios meses recopilar datos suficientes para tomar decisiones estadísticamente significativas.
Las pruebas A/B, por ejemplo, deben ejecutarse hasta reunir suficientes datos para determinar con seguridad un ganador. Además, el análisis y el ajuste continuos son fundamentales para un CRO eficaz. Se trata de un proceso dinámico de mejora constante.
Sin duda, el CRO y el SEO están estrechamente relacionados. Una experiencia de usuario mejorada, objetivo principal del CRO, puede reducir las tasas de rebote y aumentar los tiempos de permanencia, señales que los motores de búsqueda interpretan como un sitio web de alta calidad. Además, las pruebas A/B pueden revelar información valiosa sobre el contenido y los elementos de diseño preferidos, que puede servir de base para su estrategia de SEO.
Es importante recordar que una estrategia digital completa aborda tanto el SEO como el CRO, ya que las mejoras en un área suelen beneficiar a la otra.
El éxito del CRO se mide principalmente por el aumento de la tasa de conversión de su sitio web. Sin embargo, hay otras métricas que son indicadores importantes y fundamentales en la mejora del rendimiento del sitio web.
Una reducción de la tasa de rebote, un aumento del tiempo de permanencia en la página, un mayor número de páginas vistas por sesión y un mayor compromiso de los clientes indican que los usuarios encuentran su sitio más relevante y atractivo, lo que debería traducirse en más conversiones.
En última instancia, la mejor medida del éxito del CRO es la mejora de los resultados empresariales: más clientes potenciales, más ventas y mayores ingresos.